Una vez terminado el verano y que empieza el mal tiempo, nos volvemos a poner serios, y volvemos a seguir aprendiendo sobre la alimentación y los aminoácidos.
Como ya habiamos dicho los Aminoácidos son la base de las proteínas. Nuestras necesidades diarias de proteínas son realmente de aminoácidos. Son los principales componentes del músculo, hormonas, enzimas, hematíes, anticuerpos y otros tejidos de nuestro organismo. Su papel es fundamental.
Los aminoácidos, especialmente los esenciales, pueden resultar más valiosos en la prevención y tratamiento de las enfermedades que los minerales, grasas o carbohidratos.
Se han desarrollado terapias con aminoácidos para detener el proceso del herpes, mejorar la memoria, eliminar la depresión, aliviar la artritis, alergías.....
Alrededor del 70% de la proteína de los llamados países desarrollados" proviene de las fuentes animales, mientras que la mayor parte de la población mundial son vegetarianos, la mayor parte no por elección, si no por falta de recursos. Asi pues los vegetarianos tienen que tener más cuidado con la ingesta de calorías, las dietas vegetarianas normalmente suelen tener entre 80-100 gramos de proteína por día, pero el probrema radica en la deficiencia de determinados aminoácidos, particularmente los esenciales, en dicho tipo de alimentación.
Los vegetarianos frecuentemente tienen carencia de L-carnitina, ya que solo se encuentra en fuentes animales. El secreto es la variedad, si diariamente ingieren cereale sintegrales, legumbres, semillas, frutos secos suplirán esta carencia, ya que los aminoácidos funcionan con un sistema de complementación de vitaminas, cuando dos alimentos contienen proteínas con aminoácidos limitantes diferentes pero en la misma comida el aminoácido de una proteína compensa la diferencia de la otra, dando lugar a una proteína de alto valor biológico.
Como ya hemos hablado de en que alimentos podemos encontrar cada aminoácido, y ya os habéis apuntado, cuales son los que no ingeris, podemos pasar a saber que enfermedades están ligadas al
deficit de cada uno de ellos:
ESENCIALES:
Isoleucina:
Irritabilidad, fatiga, dolores de cabeza y depresión.
Fenilalanina:
Falta de reflejos y reacción, alteraciones del ritmo cardíaco.
Sin embargo no deben consumirla las embarazadas, ni enfermos de cáncer de piel
Leucina:
Peor cicatrización de heridas y traumatismos. Mayor predisposición a padecer lesiones en el hígado, alteraciones de la conducta, alteraciones de la glucosa, alteraciones en la masa muscular, deficiencia en el crecimiento.
Trastornos mentales.
Lisina:
Anemia. Deficiencia en la capacidad de respuesta inmunitaria. Alteraciones del colágeno. Alteraciones gástricas. Alteraciones en el correcto desarrollo infantil. Cambios de humor.Falta de concentración. Falta de apetito. Mala absorción y distribución del calcio. Pérdida de peso. Trastornos del metabolismo de los lípidos. Trastornos del crecimiento.
Metionina:
Mayor propensión a las infecciones, a la acumulación de colesterol, a padecer anemia, a padecer esquizofrenia histadélica, a fiebre reumática infantil y mayor predisposición a la acumulación de radicales libres.
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Treonina:
Mayor predisposición a padecer infecciones intestinales, a padecer hígado graso y mala absorción de nutrientes.
Triptófano:
Deficiencia en la absorción correcta de la vitamina B3 o niacina, mayor predisposición a padecer algunas enfermedades cardíacas, alteraciones del sistema nervioso, Insomnio, trastornos del crecimiento, cáncer, trastornos del sistema inmunitario.
Valina:
Peor cicatrización de heridas y traumatismos. Mayor predisposición a padecer lesiones en el hígado y la vesícula biliar, alteraciones de la conducta, alteraciones de la glucosa, alteraciones en la masa muscular.
Trastornos de la mielina y del sistema nervioso.
Histidina:
Mayor predisposición a los vómitos durante el embarazo. Que la respuesta inmunitaria sea más deficiente. Mayor predisposición a la acumulación de radicales libres.Trastornos en la audición.
NO ESENCIALES:
Ácido aspártico:
Alteraciones del sistema nervioso.Cansancio y fatiga.Alteraciones cardiovasculares y metabólicas.Trastornos hepáticos por intoxicación.
Ácido glutámico:
Alteraciones graves en el aprendizaje, la memorización y la plasticidad neuronal. Alteraciones importantes del sistema nervioso. Falta de concentración y de reflejos.
Asparagina:
Alteraciones en el sistema nerviosos, metabólicas, alteraciones en las funciones cerebrales.
Aumento de la irritabilidad. Dolores de cabeza. Trastornos de la memoria.
Alanina
Problemas prostáticos. Alteraciones de la glucosa. Mayor predisposición a las infecciones. Debilidad muscular. Alteraciones del sistema nervioso. Falta de reflejos y de concentración.
Arginina:
Alteraciones en el crecimiento. Debilidad y cansancio muscular. Mayor predisposición a padecer arterioesclerosis. Provoca la presencia excesiva de amoníaco o lisina. Caída del pelo. Estreñimiento. Hígado graso. Eritemas.
Cisteína:
Alteraciones cardiovasculares provocadas por ateromas de colesterol. Mayor predisposición a alteraciones hepáticas e infecciones a intoxicaciones orgánicas y a enfermedades degenerativas.
Glicina:
Alteraciones del crecimiento. Contracciones musculares bruscas. Movimientos exagerados. Espasticidad. Retraso en la restauración de los tejidos dañados. Debilidad de la próstata y del sistema inmunológico. Trastornos de la glucosa.
Glutamina:
Retraso en la cicatrización de las úlceras digestivas. Trastornos musculares.
Prolina:
En caso de cáncer, mayor predisposición a las metástasis. Retraso en la cicatrización de las heridas y quemaduras. Mayor predisposición a padecer alteraciones cardiovasculares. Debilidad en ligamentos y tendones. Retraso en la recuperación de tejidos conectivos dañados.
Serina:
Alteraciones en la textura de la piel. Trastornos del colesterol y/o los triglicéridos. Trastornos en las vainas nerviosas. Mayor propensión a padecer infecciones. Trastornos en el desarrollo de los músculos.
Tirosina:
Alteraciones en la pigmentación de la piel y del tiroides. Alteraciones en los cambios de humor y conducta. Alcaptonuria. Albinismo. Estados de depresión y ansiedad. Mayor predisposición a padecer estrés. Y Tirosinemias,
un error del metabolismo, usualmente encontrado en recien nacidos, en
donde el cuerpo humano no puede romper el aminoacido tirosina.
Histidina:
Mayor predisposición a los vómitos durante el embarazo. Que la respuesta inmunitaria sea más deficiente. Mayor predisposición a la acumulación de radicales libres. Trastornos en la audición.
Y os preguntaréis porque os cuento los problemas que provoca las carencías que los beneficios, bueno, ¡¡¡pues porque la lista así era más corta!!, digamos que para ver los beneficios le tendriamos que dar la vuelta.
Aunque lo iremos viendo en la siguiente entrada, mientras no os olvideís de que hay más publicaciones en
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¡HASTA LA PRÓXIMA!!
